¿Qué necesito para vender mi casa?

Guía rápida para propietarios

Guía rápida para propietarios
Vender tu vivienda no tiene por qué ser un proceso complicado. Con la documentación adecuada, una buena preparación y el acompañamiento correcto, puedes cerrar la operación con éxito, rapidez y sin dolores de cabeza.
En esta guía te explicamos qué necesitas tener preparado antes de poner tu casa en venta y qué pasos seguir para evitar errores comunes.

1. Documentación básica obligatoria

Antes de mostrar tu propiedad o negociar con un comprador, asegúrate de tener en regla estos documentos:

  • Escritura de propiedad: acredita que eres el dueño legal del inmueble.
  • DNI del propietario: vigente y en buen estado.
  • Recibo del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles): actualizado, preferiblemente del año en curso.
  • Certificado de eficiencia energética: obligatorio para vender, muestra el consumo energético de la vivienda.
  • Cédula de habitabilidad (si aplica en tu comunidad autónoma).
  • Últimos recibos de suministros (agua, luz, gas) al día.
  • Certificado de estar al corriente de pagos con la comunidad.
  • Estatutos de la comunidad de propietarios (en caso de pisos o viviendas en régimen de comunidad).

Estos documentos no solo son necesarios para el proceso legal, sino también para generar confianza en los compradores desde el primer contacto.

2. ¿Y la nota simple?

Sí, también es importante.
La nota simple registral es un documento que puedes solicitar en el Registro de la Propiedad. Informa sobre la titularidad del inmueble, su situación legal y si tiene cargas, hipotecas o embargos.

Tu agente inmobiliario puede ayudarte a obtenerla si lo necesitas.

3. Prepara tu casa para causar una buena impresión
Una vivienda en buen estado se vende más rápido y a mejor precio. No se trata de gastar grandes sumas, sino de mejorar su presentación:

  • Realiza una limpieza profunda.
  • Repara pequeños desperfectos (grifos que gotean, enchufes sueltos, puertas que chirrían).
  • Ordena y despeja espacios: menos es más.
  • Despersonaliza: los compradores deben poder imaginar la casa como suya.
  • Si es posible, haz un pequeño “home staging” o decorado neutro.

Y sobre todo: invierte en buenas fotos. Las imágenes profesionales marcan la diferencia a la hora de atraer visitas reales.

4. Fijar un precio adecuado

Uno de los errores más comunes es sobrevalorar la propiedad.
 Un precio fuera de mercado aleja a compradores y puede alargar el proceso durante meses.
Lo ideal es hacer una valoración realista basada en datos actuales del mercado. En nuestra inmobiliaria te ofrecemos esta valoración de forma gratuita y sin compromiso.

5. Deja que un profesional te acompañe

Vender una casa implica trámites, negociaciones, gestiones legales, y coordinación de muchos detalles.
 Contar con un agente inmobiliario te permite:

  • Ahorrar tiempo.
  • Evitar errores legales o fiscales.
  • Filtrar compradores realmente interesados.
  • Negociar con seguridad.
  • Llegar a la notaría con todo en regla.

Además, tienes un punto de apoyo humano durante todo el proceso.